
Nadie puede dar lo que no tiene. La clave del éxito tanto personal como relacional radica sin duda en amarme primero a mí y en la misma proporción al otro.
Si no asumo como máxima responsabilidad el estar en un estado de amor y cuidado hacia mí, ,todo lo que haga con el otro carecerá de base real. Será un amor de mercado.
Hay 5 pautas que nos puedes llevar sin duda a la que será la relación más satisfactoria de nuestra vida,con nuestro propio ser.
Primero, aceptar mi individualidad personal. La comparación en cuanto a estándares de belleza o éxito que tiene la sociedad no tiene nada que ver con mi valía personal.
Segundo, no juzgarme nunca en base a las opiniones que otros tengan de mí. Programas de mi infancia que deben ser modificados.
Tercero, identificar qué concesiones realizo en base a la ganancia secundaria. Por ejemplo, aceptar dejar de lado lo que quiero hacer por estar con la pareja y no estar solo.
Cuarto, ser siempre siempre fiel a mí mismo, no se trata de ser egocéntrico sino equilibrado. Y comprometerme a pasar tiempo de calidad conmigo mismo. Para mi bien y el de los seres que sienten.
Y quinto, y último, vigilar atentamente mi diálogo interno y modificar todas aquellas sentencias del «yo soy» que no me favorezcan.