El Servicio de Epidemiología de la Consejería de Salud de la Región de Murcia ha comenzado a observar que la tendencia en el descenso de número de contagios en nuestra comunidad comienza a confirmarse. Y es que, la segunda ola de la pandemia del coronavirus está dando síntomas de estar estabilizándose tras un notable descenso de casos de Covid-19 con 289 positivos confirmados en las últimas 24 horas, es decir, casi 100 menos que en el anterior recuento y muy por debajo de los alrededor de 400 que se detectaban cada día de la semana pasada.
Los municipios que siguen capitaneando la lista de contagios siguen siendo Murcia, Lorca, Cartagena y Totana.
También la tasa de positivos en las PCR realizadas en las últimas horas (concretamente, 2.603) vienen a confirmar esta estabilización, ya que se sitúa en el 11,10%, por debajo de la que se llevaba registrando durante los últimos días.
Y es que, como decimos, el ritmo de contagios se ha frenado en la última semana. El ligero descenso de la curva epidémica se produce, eso sí, en buena medida, por la mejora de la situación en Jumilla y Lorca, las dos localidades que están sometidas a confinamiento perimetral y otras restricciones de la Fase 1 desde mediados de septiembre, según apuntan desde la consejería de Salud.
Unas medidas que, en el caso de Lorca, según apuntaba en las últimas horas el diario La Verdad, se han intensificado con la colaboración de la Comisaría de la Policía Nacional en la ciudad del Sol, que ha establecido un dispositivo con la intención de controlar el confinamiento de la ciudadanía que ha dado positivo en Covid. Los agentes, listado en mano de casos positivos, se desplazan físicamente a los domicilios para comprobar que efectivamente se está cumpliendo con el confinamiento.
Hasta el momento la Policía Nacional ha comprobado ya alrededor de un centenar de viviendas -según señalan el diario regional del Grupo Vocento- y únicamente se han impuesto dos sanciones. La Brigada de Seguridad Ciudadana también lleva a cabo diariamente controles en las principales calles de la localidad, así como en los puntos de acceso y salida de la ciudad.
Una crisis sanitaria que cuenta con los ciudadanos (y con su responsabilidad) como aliados para vencer al virus, pero que también se debe producir desde la política.
Eso es lo que piensan desde el Partido popular regional, desde donde denuncian que el PSOE regional no está a la altura en un momento tan complicado como el que se vive en la Región debido a la pandemia de COVID-19, y piden a Diego Conesa que no utilice a sus alcaldes para su beneficio político.
El alcalde popular, Joaquín Buendía, tachaba de “lamentable” la estrategia que -asegura- utiliza el líder socialista regional cuando -advierte- lo que se debería producir en una situación como la actual es la unión de todos los alcaldes de la Región para trabajar unidos frente al único enemigo común, el virus».
Buendía insiste en que el Gobierno regional ha hecho un esfuerzo extraordinario para dar respuesta a esta situación tan complicada, aumentando las plantillas de personal sanitario y educativo y poniendo los medios necesarios en cada municipio», por lo que aseguró no entender la estrategia del PSOE, que calificó de “estrategia demagoga sin fundamento”. Además, instó a los alcaldes socialistas, y al propio Conesa, a que contribuyan exigiendo al Gobierno de España el rescate necesario para todos los ayuntamientos.
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