OPINIÓN | ‘La mujer que mueve el mundo’, por Juana Rocamora (SOMOS REGIÓN)

El domingo, 8 de marzo, celebramos el día internacional de la mujer. Esta fecha no surgió por casualidad. Corría el año 1911, cuando se produjo un terrible suceso, un incendio en una fábrica de Nueva York que acabó con la vida de más de 140 trabajadores, la mayoría de ellos, mujeres.

Miramos atrás y cuesta trabajo creer que, hasta hace unos años, no tantos, la mujer no fuera apta para poder votar en unas elecciones, no era dueña de su dinero, estuviera vetada en universidades y determinados trabajos…la historia ha sido cruel con la mujer.
Si pudiéramos volver atrás y preguntar a las mujeres que lucharon por conquistar la cima de la igualdad, de la tolerancia, del reconocimiento, estoy convencida que nos sorprenderíamos al comprobar que tampoco estarían conformes con el papel que desempeña actualmente la mujer.

Seguimos marcadas por ese afán de demostrar que podemos con todo. Mujer trabajadora, mujer que cuida a su familia, mujer comprometida, mujer amiga, mujer madre, mujer hija, mujer amante…y es que la vida nos pone infinidad de papeles en los que buscamos la excelencia. Esta excelencia no es solo consecuencia de la sociedad en la que vivimos, también viene marcada por una misma.

Los cuentos de princesas en apuros, arrojando su pelo por la ventana de una torre, para que pudiera trepar el príncipe y ser salvadas, sin pensar que ese pelo se lo podía haber cortado, atarlo y bajar ella misma, tampoco han ayudado mucho a fomentar la fuerza y determinación de las mujeres. A pesar de estos cuentos de príncipes y princesas en apuros no podemos permitir caer en un falso espejismo, donde veamos gigantes cuando tan solo hay molinos de viento. Claro que se ha conseguido mucho en poco tiempo, claro que queremos más, claro que somos capaces, claro que seguimos apartadas por nuestro sexo en determinadas cuestiones laborales, sociales e incluso familiares, pero esta lucha no debe hacer que combatamos entre nosotras mismas ni contra los hombres, esta lucha es de todos. La igualdad es equilibrio, es perfección, lo contrario genera caos y alimenta situaciones injustas tanto para hombre como para mujeres.

La sociedad española está despertando y con ello se aprobó una ley de igualdad entre hombre y mujer y algunas de las conductas que discriminaban a la mujer en determinados sectores cada vez son las menos. Pero ese despertar, en algunos casos, se queda en eso, en un despertar. Los políticos que nos representan ofrecen un discurso que nada tiene que ver con las necesidades que vivimos las mujeres. Se les llena la boca de conciliación familiar, cuando la realidad es que no se aplica. Tenemos partidos políticos que se jactan de tener en el gobierno mas mujeres que hombres, como si de un logro se tratase, estaría mejor valorar la profesionalidad y preparación de la persona por encima de su sexo. Los hay, que para salir en televisión lanzan mensajes escandalosos, con el único deseo de que se hable de ellos, sin pensar que todo no vale. Y es que la vida, ya nos lo pone complicado, como para que tengamos que bailar al son de los intereses políticos.

La mujer a lo largo de los siglos ha demostrado que es capaz de mover el mundo con sus manos. Ser mujer es un privilegio del que debemos sentirnos orgullosas. Desde Somos Región, felicidades a todas las mujeres y todos los hombres que forman el equilibrio perfecto de la vida.

Juana Rocamora | Portavoz de SOMOS REGIÓN

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