El eurodiputado murciano del PSRM-PSOE, Marcos Ros, coge La Lupa de Metrópolis Daily.
En estas semanas que llevamos de continua agitación política, mucho se ha hablado sobre corrupción política en la Región de Murcia, sobre mociones de censura, apoyos, compras de voluntades, transfuguismo y un sinfín de circunstancias que solo empañan el debate político que necesitamos.
Ahora le toca el turno al Ayuntamiento de Murcia, que debatirá el jueves la moción de censura presentada por PSOE, Ciudadanos y Podemos, siempre que ningún acontecer extraño de última hora lo impida, claro. Volveremos a hablar de corrupción, de contratos y de la necesidad de regenerar la vida política en el ayuntamiento que, a veces por obvio, se nos olvida reclamar.
Pero Murcia también demanda un cambio de modelo tras 26 años de políticas basadas en la especulación urbanística, los proyectos faraónicos vacíos, la desigualdad social, el desgobierno y la ausencia de proyecto de municipio. Es un momento propicio para que el cambio de gobierno se acompañe con un cambio radical de políticas.
El municipio afronta decisiones clave que marcarán el futuro, como la regeneración urbana del sur, dividido durante décadas hasta que el gobierno de Sánchez puso los 650 millones de euros que han hecho realidad el soterramiento.
También la necesaria revisión del Plan General, para articular nuestro territorio, ordenar y proteger nuestra Huerta, diseñar una movilidad sostenible de una vez por todas, equilibrar dinámicas entre pedanías, y ofertar suelo para las grandes empresas que siguen buscando otros municipios.
Pero sin duda, lo más importante es cohesionar a los vecinos del municipio, reducir la apabullante desigualdad que hay entre los habitantes de la ciudad y las pedanías, ofrecer servicios públicos de calidad, y poner en valor la cultura, la educación, el dinamismo social, la participación ciudadana. En definitiva, llevar al municipio hasta el siglo XXI.
Todo ello, en un contexto inmejorable que nos brinda el Plan de Recuperación Europeo, y la posibilidad de financiar grandes proyectos de transformación, que acompañen a una recuperación para todos, reduciendo al mínimo las desigualdades.
Por eso esta moción, justificada por la necesidad de regeneración política, es todavía más necesaria para producir la transformación que Murcia necesita.